Tratamientos para cáncer de piel
El cáncer de piel es el tipo de cáncer más común y existen diferentes tratamientos según el tipo de cáncer, su etapa y la salud general del paciente. Los tres principales tipos de cáncer de piel son el carcinoma de células basales, el carcinoma de células escamosas y el melanoma, siendo este último el más agresivo. Afortunadamente, existen varias opciones de tratamiento que ofrecen altas tasas de éxito si se detecta a tiempo.
Cirugía
La cirugía es el tratamiento más común para el cáncer de piel, especialmente para los tipos menos agresivos como el carcinoma de células basales y el carcinoma de células escamosas. Dependiendo del tamaño y la localización del tumor se utilizan diferentes tipos de cirugía.
Terapia con láser
La terapia con láser puede ser una opción en casos de cáncer de piel en estadios tempranos. Utiliza un haz de luz intensa para destruir las células cancerosas. Es menos invasiva que la cirugía, lo que la convierte en una opción atractiva para áreas sensibles del cuerpo o en personas con problemas de cicatrización. Sin embargo, no se usa para tipos más avanzados de cáncer como el melanoma.
Crioterapia
La crioterapia consiste en congelar las células cancerosas utilizando nitrógeno líquido. Es un tratamiento común para queratosis actínicas (precursoras del cáncer de piel) y algunos tipos de carcinoma de células basales en estadio temprano. Después de la aplicación del nitrógeno líquido, las células cancerosas se destruyen y la piel lesionada se cae en unos días.
Radioterapia
La radioterapia se usa principalmente en casos en los que la cirugía no es una opción, como en personas mayores o en áreas donde la cirugía podría causar una deformidad significativa. Este tratamiento utiliza rayos X de alta energía para destruir las células cancerosas. Aunque no es la primera opción para la mayoría de los tipos de cáncer de piel, puede ser muy eficaz cuando no se pueden utilizar otros métodos.
Inmunoterapia
La inmunoterapia está revolucionando el tratamiento del melanoma avanzado. Se utilizan medicamentos que estimulan el sistema inmunológico del cuerpo para atacar las células cancerosas. Ejemplos de estos medicamentos incluyen los inhibidores de puntos de control inmunitario, como el pembrolizumab o el nivolumab, que han demostrado mejorar significativamente la supervivencia en pacientes con melanoma metastásico o no operable.
Quimioterapia tópica
En algunos tipos de cáncer de piel en estadios muy tempranos, se puede usar una crema quimioterapéutica que se aplica directamente sobre la piel. Un ejemplo común es el 5-fluorouracilo (5-FU), que actúa destruyendo las células cancerosas a nivel local sin afectar al resto del cuerpo.
Terapia fotodinámica
La terapia fotodinámica combina un medicamento fotosensibilizante con una fuente de luz para destruir las células cancerosas. Se utiliza principalmente en casos de cáncer de piel superficial. Este tratamiento es menos invasivo que la cirugía y tiene menos efectos secundarios, pero no es útil para cánceres más profundos o melanomas avanzados.
El tratamiento para el cáncer de piel depende de varios factores, incluyendo el tipo de cáncer y su estadio. Las opciones de tratamiento, que van desde la cirugía y la radioterapia hasta la inmunoterapia y la crioterapia, ofrecen diferentes ventajas según cada caso. El diagnóstico temprano sigue siendo de lo más importante para aumentar las tasas de éxito en el tratamiento, por lo que es esencial realizar inspecciones regulares de la piel por propia mano y consultar a un dermatólogo ante cualquier cambio sospechoso.
Recuerde no automedicarse y consultar a su médico